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¿Pies resecos y agrietados?: Recupera y protege tu pies con rutina y cuidados caseros

  • Lunes 24 de enero de 2022
  • 11:03 hrs

La doctora Melissa Tejeida, de Ciudad de México, entrega una serie de consejos para mantener un pie con una piel saludable.

Siempre estamos pendiente de nuestra apariencia. De lucir unas piernas tonificadas, un corte de pelo o un cutis perfecto. Pero muchas veces nos olvidamos de otra parte importante de nuestro cuerpo y que también es reflejo de nuestra belleza: Los pies.

Estamos en la temporada de los pies descubiertos, y no solamente en casa, sino también cuando vamos a la piscina, la playa o caminamos por la calle en sandalias. Por lo tanto, seguramente querrás que éstos luzcan bien, sin callos ni durezas. Así que, para ayudarte a tener unos pies suaves y con una piel sana la doctora Melissa Tejeida, de Ciudad de México, experta en pie diabético, entrega una serie de consejos para mantener un pie con una piel saludable.

Cuidados de los pies resecos

Los pies se caracterizan por tener una piel gruesa y acumulan una importante cantidad de grasa debido a que amortiguan las pisadas.

Puede ser una piel que sufra de resequedad, sobre todo la piel de los talones. Si no se lubrican podría favorecer la apariencia de grietas, que son peligrosas para aquellas personas que tiene diabetes puesto que las grietas podrían provocar una lesión e infectarse.

Neuropatía autonómica

Muchas veces los pacientes que viven con diabetes sufren frecuentemente de resequedad porque presentan una complicación que se llama Neuropatía autonómica, donde la neuropatía no permite que la piel tenga la capacidad  de lubricarse sola, generalmente es una manifestación de los altos niveles de glucosa en la sangre. Enfermedades circulatorias también pueden favorecer la presencia de la resequedad

Favorecen la resequedad:

-Uso de tacones

-Calzado sin suela adecuada

-Sandalias

-Caminar descalzo

Calzado recomendado:

-Amplio

-Sin costuras

-Tacón no más de 3 cm

No lavar los pies con agua caliente, porque favorece la resequedad, no permanecer más de 10 minutos en el agua.

Si vas a la piscina o a la playa es muy importante que apliques protector solar en la planta y el dorso del pie y ducharse posteriormente para que los pues no se resequen.

Lavarse los pies con una esponja suave y solo utilizar jabón neutro para no lastimar la piel.

Utilizar crema y aceites, el ideal es el aceite de almendras dulces por su capacidad de hidratación.

Cremas o geles con urea pueden ayudar a hidratar profundamente la piel, se deben aplicar antes dormir y después de bañarse porque en estos momentos la piel está más reseca.